La Confraternidad Universal de Santa Filomena es la familia filomeniana en el mundo. Es un movimiento internacional de los fieles que, a través de la devoción a la Mártir, promueve el amor a Jesús y María. Los centros individuales, a través de su autonomía local, promueven la devoción a la Santa y el apoyo al Santuario.
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La constitución
La Confraternidad de Santa Filomena fue elevada al rango de Archi confraternidad por el Papa León XIII.
Pope Leo XIII
El 15 de enero de 1912, San Pío X renovaba su bendición a la Obra de Santa Filomena con estas conmovedoras palabras: “Para los bienamados socios de la Archi confraternidad de Santa Filomena, y del Beato J. M. Vianney, con el vehemente deseo de que, por intercesión de la Una y del Otro, el Señor sea pródigo de sus más grandes favores para todos. Nosotros les enviamos cordialmente la Bendición Apostólica”. El 21 de mayo de 1912, para ratificar firme y definitivamente el culto a Santa Filomena y dar por terminadas las discusiones estériles, San Pío X elevó la venerable Archi confraternidad de Santa Filomena a Archi confraternidad Universal mediante la Bula Apostólica “Pias Fidelium Societates” en la cual precisaba explícitamente: “Decretamos que este escrito sea y permanezca siempre inmutable, válido y eficaz, y que reciba y alcance sus efectos plenos y completos. Así debe ser regularmente juzgado y definido. Si se procediera de forma contraria, será nula y sin valor, quienquiera que sea su autoridad…” La Obra o Archi confraternidad Universal de Santa Filomena actualmente sigue promoviendo la devoción a la Santa y el apoyo a las obras relacionadas con ella, junto con el Santuario de Mugnano, Sede del culto y con los demás Centros de todas las naciones.
La Obra o Archi confraternidad Universal de Santa Filomena es una asociación de oración y apostolado que propone:
- Comprometer la vida con el Evangelio de Cristo, siguiendo el ejemplo de Santa Filomena y la difusión de su culto.
- Atraer al mayor número de personas a los proyectos apostólicos que encomendaron los Papas León XIII y Pío X bajo el patrocinio de Santa Filomena y del Santo Párroco de Ars.
- La educación cristiana de los niños y de la juventud.
- La oración para las vocaciones y la santificación del clero.
